Una reseña de Haunting in Venice: un misterio de terror a medias

Crédito de la foto: 20th Century Fox

Menos de dos años después de que Hércules Poirot apareciera en la pantalla grande en Muerte en el Nilo, Kenneth Branagh vuelve a dirigir y protagonizar una nueva entrega de sus adaptaciones de Agatha Christie. Esta vez adapta Halloween’en Party a Una inquietante Venecia, una película de misterio y asesinato ambientada en una mansión la noche de una sesión espiritista. Esta película infunde los tropos de género de Murder on the Orient Express y su predecesora con el género de terror con resultados mixtos. Cada película de la serie de Branagh ha tenido distintos niveles de mediocre, y la primera probablemente sea la más visible. Sin embargo, éste es una decepción.

El punto de venta de todas estas películas es el elenco repleto de estrellas. Puede que esta salida tenga menos caras conocidas, pero hay mucho talento en exhibición aquí. La ganadora del Oscar Michelle Yeoh (maldita sea, se siente bien escribir eso) aparece en la película como Joyce Reynolds, la médium que dirige la sesión. Es una intérprete brillante que consigue su tiempo para brillar, ya que vende cada momento y domina la pantalla. Tina Fey aparece como Ariadne Oliver en su primera película no cómica, y aquí puede mostrar un músculo diferente al que estamos acostumbrados. Branagh también se reúne con Jamie Dornan de la aclamada por la crítica Belfast, y los resultados funcionan bien para esta mezcla de géneros.

Quizás el aspecto más interesante de A Haunting in Venice es el elemento de…